Bueno la cosa es que cuando yo tenía
como 12 o 13 años me dio una obsesión por coleccionar balas. Me las robaba, las
compraba, le ofrecía plata a los oficiales de seguridad, etc. Y logre hacerme
una colección grande de balas.
Entonces se me ocurrió la gran idea
de quitarles la pólvora, hacerles unos huecos pequeños para luego meterles una
argolla y entonces, tenerlos de llaveros. Mi mochila de colegio hacia un escándalo
con el montón de llaveros ahí pegados.
Un día estaba desarmando una bala
calibre 38mm Special. Le quite la bala (la cabeza) le logre sacar toda la pólvora,
cogí un taladro, le hice un hueco, y según yo, ya estaba lista para ser un
lindo llavero.
De un momento a otro cogí un cincel,
un mazo y le di en el puro centro del detonador….
(Se pueden imaginar la clase de
estruendo que se escuchó en mi casa)
Yo quede sordo por unos segundos,
estaba asustado y temblaba pero jugaba de valiente, sacaba pecho.
Lo segundo que hice fue ver el
charco de sangre en el piso de mi cuarto…
Lo tercero que hice fue ver de dónde
venía la sangre…y venia de mi entrepierna… (comienza el pánico).
Lo cuarto que hice fue revisarme los
huevos. Hasta ese momento yo pensaba que no tenía testículos…que había perdido
mi par de compañeros. Pero estaban a salvo.
Lo quinto que hice fue levantarme de
la silla, revisarme el resto de cuerpo, corroborar que todo andaba bien y
entonces ponerme a limpiar la sangre con mi camiseta.
Luego de eso mi mama subió al cuarto…me
vio todo lleno de sangre, y se imaginaran la cagada que me dieron.
Y pues sí, me dispare en la pierna
de una forma muy rustica, la pólvora y el detonador pasaron a centímetros de
mis testículos y lo que quedo de la explosión se puede ver todavía en el piso
de ese cuarto.
Luego me explicaron que todas las
balas tienen un detonador y que dentro de ese compartimento se guarda también pólvora.
Diay, es que no había Google y todo era a prueba y error.
Y aquí está el recuerdo de la famosa
bala:
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